Sonaron:
01. Prince – 1999
02. Janelle Monae – Make me feel
03. Hercules & Love Affair – Controller (feat. Faris Badwan)
04. My Robot Friend – One more try (Feat. Antony)
05. Juliana Hatfield – Physical
06. The Bangles – Walking down your street
07. Betacam – No más
08. Astrud – Acordarnos
09. Birkins – Esquinas de juventud
10. Los Bólidos – Ráfagas
Gracias a jenesaispop me entero de que Caroline Rose ha sacado este vídeo tan chulo para Bikini, una de las canciones de las que hablaba en el último podcast de Los Latidos.
Podcast del que, por cierto, quería haber tenido ya un nuevo programa subido, pero parece ser que lo de encontrar un rato tranquilo para sentarme a grabarlo va a ser una quimera hasta dentro de unos días.
Con esta canción inauguramos la primera serie de esta nueva temporada del blog: “Canciones que no llegaron al podcast”.
La elegida para empezar la serie es una canción de Lora Logic, Brute fury. Está incluida en el recopilatorio de Essential Logic llamado Fanfare in the garden, que sacó Kill Rock Stars hace unos años.
Cuando escuché la canción por primera vez, me quedé de inmediato completamente pillada. La puse de nuevo, una y otra vez, y me pasé varios días que casi no escuchaba otra cosa. En teoría, debería haber estado incluida en el sexto programa del podcast, justo después de la no menos maravillosa Getting nowhere fast de Girls at Our Best!.
Sin embargo, me pudo el pensar que el programa se me iba por unos derroteros de los que me iba a ser difícil volver para seguir con las otras canciones que tenía preparadas, y al final se quedó sin sonar. Así que, al menos, hoy empiezo la serie con ella.
Ese programa, por cierto, fue el que estuvo motivado y dominado por las noticias de mierda que sacaba El País sobre que no hacía falta coger dos o tres semanas de vacaciones, que con unos días era suficiente (por cierto, no soy capaz de encontrarla, pero sé que no me la he inventado), y las maravillosas declaraciones de esa honrada trabajadora y esforzada estudiante que es Cristina Cifuentes, diciendo que las vacaciones son voluntarias.
Menos mal que a lo largo de la grabación me fui tranquilizando y terminé con esa preciosa canción de Windsurfing, Never too late, que editó Discos Garibaldi y que sólo espero que nunca caiga en el olvido.